Los espacios vivos de trabajo que contagian su vitalidad a los empleados
Los trabajadores esperan espacios de trabajo flexibles y llenos de energía, con beneficios para la vida laboral que respalden su productividad y bienestar. En una era donde cada vez es más complicado atraer y retener talento, nunca los espacios sostenibles, flexibles, que ponen la experiencia del empleado en el centro, y que fomentan la colaboración y la creatividad han sido más vitales.
En los últimos años, la relación de los empleados con la oficina tradicional ha cambiado significativamente. Antes, era vista como un lugar donde los trabajadores tenían que estar presentes para realizar su jornada. Pero ahora, con los nuevos modelos de flexibilidad laboral, el workplace debe pasar de un lugar en el que debemos estar, a otro donde deseamos crear, compartir y crecer. Esto comienza por entender qué quieren y esperan los trabajadores del workplace de su empresa.
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Reimaginar el entorno de trabajo significa comprender las necesidades físicas y emocionales de los empleados. Descarga nuestra guía sobre el futuro del workplace y consigue las claves para desarrollar entornos de trabajo vitales y sostenibles capaces de generar un impacto positivo en las personas, en las empresas y en el medioambiente.
Espacios vivos de trabajo, el lugar donde se gestan las ideas
Los espacios vivos de trabajo son un concepto relativamente nuevo en la gestión del workplace que se centra en la creación de entornos más flexibles, colaborativos y creativos para los trabajadores. Lugares que priorizan el bienestar de las personas y que conectan con los valores de una fuerza laboral cada vez más complicada de atraer y retener.
En lugar de seguir el modelo tradicional de una oficina con cubículos y despachos cerrados, los espacios vivos de trabajo se diseñan para fomentar la interacción y la colaboración entre las personas para proporcionar un entorno que fomente la creatividad y la innovación.
Estos espacios suelen incluir áreas de trabajo abiertas, salas de reuniones informales, zonas de descanso y espacios verdes. Los trabajadores tienen la libertad de trabajar donde les resulte más cómodo y productivo, lo que les permite adaptar su espacio de trabajo a sus necesidades y preferencias personales. También se busca promover un ambiente más relajado y menos jerarquizado que en una oficina tradicional, lo que puede aumentar la satisfacción y el compromiso de los empleados.
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Mucho más que un diseño
Los beneficios para empleados también son una parte esencial. Son servicios que llenan los espacios de vida y que promueven la salud y el bienestar. Las ofertas de restauración, de alimentación y los entornos donde se disfrutan son fundamentales para cimentar las relaciones entre los empleados en los lugares de trabajo. La comida ha unido a las personas durante mucho tiempo y desempeñará un papel fundamental para persuadir a los equipos para que regresen a la oficina.
Un espacio vivo de trabajo también busca alinearse con los valores de los empleados. Esto significa que las empresas deben comunicar claramente sus compromisos sostenibles y contar con el apoyo de los empleados cuando sea posible, en relación con el uso de energía o la gestión de residuos. Para los empleados más jóvenes la sostenibilidad es un criterio clave a la hora de decidir dónde quieren trabajar.
Un nuevo concepto de workplace que pone al empleado en el centro
Como hemos visto, los espacios vivos de trabajo son más que un nuevo diseño. Tratan de reimaginar el workplace comprendiendo las necesidades físicas y emocionales de los empleados, poniendo la experiencia del empleado en el centro. Exige que los empleadores miren más allá de los aspectos prácticos para combinar la funcionalidad de los espacios con las emociones que despiertan.
Las empresas no pueden darse el lujo de ignorar las expectativas de su gente. Una encuesta realizada por Aon descubrió que al 44 % de las empresas les resulta más difícil atraer nuevo personal, mientras que al 41 % les cuesta retener a su gente. Los espacios vivos de trabajo pueden abordar estos dos problemas al satisfacer las necesidades de las personas y proporcionarles lo que realmente les hace querer pasar tiempo en los espacios que crea la organización. "Las empresas necesitan adoptar un enfoque estratégico en el entorno de trabajo y el diseño para que las personas se sientan cómodas, brindándoles lo que necesitan para prosperar.
La forma en que las personas trabajan, y cómo experimentan el trabajo, está cambiando rápidamente. Adaptarse constantemente a los nuevos retos del mercado laboral no es fácil. Por eso hemos elaborado la guía definitiva que te ayudará a concebir el workplace donde las personas realmente quieren estar, crear y compartir.
Es el momento de garantizar que los espacios tradicionales se transformen para responder de forma óptima a los nuevos deseos y necesidades de la fuerza laboral. Su diseño debe sustentarse sobre una premisa principal: poner la experiencia del empleado en el centro. Un workplace dinámico y vivo fomenta la colaboración, es más adecuado para promover el bienestar y ayuda a generar una atmósfera más positiva y creativa. De esta manera, no solo se crea una lugar atractivo para los empleados, sino que también se genera una imagen positiva en los candidatos que una empresa quiere atraer. No pierdas más tiempo y abre la puerta de tu oficina a los espacios vivos de trabajo.